miércoles, 27 de octubre de 2010

Ser Mamá...¡Error! Por Isabel Allende

Siempre que quieren hablar de madres en la televisión muestran mujeres con chicos en los brazos, sonrientes, dulces, cariñosas, sin una pizca de cansancio, espléndidamente maquilladas y a eso agregan maravillosas frases de posters. ¡¡Mentiras !!!Las mamás no somos abnegadas amantes del sacrifico y aguerridas guerreras que todo lo pueden! (aunque más de una vez queremos abarcar TODO).

Las mamás lloramos abrazadas a la almohada cuando nadie nos ve, pedimos anestesia en el parto. Mentamos madres en 17 idiomas cuando tenemos que poner el despertador a las 2 de la mañana para ir a buscarlos a una fiesta o cuando tenemos que pararnos de la cama porque tienen fiebre o porque "no pueden dormir".

Cuando les decimos que no se peleen con ese compañerito que les dice 'enano' o 'cuatro ojos' o que les piden que les carguen la mochila y les damos toda clase de explicaciones conciliatorias, en realidad querríamos tener el cogote del pequeño verdugo entre nuestras manos.

Y también pensamos que la vieja de geografía es un mal bicho cuando les baja la calificación porque no saben cuántos metros mide el Aconcagua o el Río Bravo que, al final, a quién carajo le importa!.(Pero no lo podemos decir.)

No es que nos encante pasarnos horas en la cocina tratando de que el pescado no tenga gusto a pescado y disimulando las verduras en toda clase de brebajes, en lugar de tirar una hamburguesa a la plancha.... Es que tenemos miedo de que no crezcan como se debe. No es que nos preocupe realmente que se pongan o no un suéter.... Es que tenemos miedo de que se enfermen. No es que los queramos más cuando se bañan.... Es que no queremos que nadie les diga roñosos.

No lo hacemos por Uds. Lo hacemos por nosotras. Porque ser mamá no tiene que ver con embarazos, pañales y sonrisas de Mejoralito.Tiene que ver con querer a alguien más que a una misma. Con ser capaz de cualquier cosa con tal de que ustedes no sufran.. NADA, nunca, jamás.

Ustedes nos hacen felices.... cuando les encantan nuestras milanesas, cuando nos consideran sabias por contestar todas las preguntas de los concursos de la tele. Cuando vienen llorando a gritos porque se rasparon la rodilla y nos dan la posibilidad de darles consuelo y curitas. Cuando recién levantadas nos dicen: Qué linda estás, mamá. Cuando nos proponen casamiento porque somos "SU NOVIA".(y lo disfrutamos mientras llega la primer noviecita que nos destierra de ese lugar).

USTEDES NOS HACEN MEJORES. Nos dan ganas y fuerzas. Nos comeríamos un animal crudo antes de que les toque un dedito del pie. Nos lavamos la cara y salimos del baño con una sonrisa de oreja a oreja para hacerles saber que la vida es buena, aunque nos vaya como el reverendo carajo...

Cantamos las canciones de Mundo de Caramelo y vemos Barney, Pucca y Bakugan y escuchamos a “High School Musical” y repasamos 500 veces la tabla del 2 y arreglamos el carburador para llevar a los chicos al fútbol, al inglés, a dibujo, a la psicóloga, a básquet, a vóley, a danzas, a la casa de la amiga, a la maestra particular, al dentista, al médico, a comprar un pantalón, a comprar la vacuna de su muñeca o el muñeco que hace falta para la colección...

Y armamos 24 bolsitas con anillitos y pulseritas y tratamos de que el pastel parezca una Princesa o un Spiderman. Y nos buscamos otro trabajo y sacamos créditos y nos compramos libros y vamos al psiquiatra y al pediatra y a los videos y negociamos con los maestros y los acreedores y recortamos figuritas, buscamos vocales en las revistas y estudiamos junto a ustedes ríos, provincias, las capitales de los países de Europa y nos ponemos lindas y nos enojamos y nos reímos y nos salimos de quicio y nos convertimos en la bruja y la princesa de todos los cuentos.....Sólo y exclusivamente para verlos felices.

VERLOS FELICES ES LO QUE NOS HACE FELICES. Ojalá pudiéramos pegar el mundo con cinta scotch (como la lámpara que cayó en combate en la última guerra de la piyamada), para que fuera un lugar mejor para ustedes. GRACIAS POR HACERME SU MAMÁ. GRACIAS POR HACERME TAN IMPORTANTE. Gracias, por esas porquerías que hacen en el colegio con corchitos y palillos (que casi nunca entiendo para que sirven pero guardo religiosamente). Gracias por los abrazos, los besos, las lágrimas, los dolores, los dientes de leche, las cartitas, los dibujos en el refri, el Tempra. Por tantas noches sin dormir, los boletines, las plantas rotas del jardín por jugar a la pelota, Por mi maquillaje arruinado por ser usado para jugar a la mamá, por las fotos de la primaria...

Son mis mejores medallas. Gracias porque LOS AMO. Y ése, es el amor que me hace grande.

Yo lloré por sentirme identificada, no podria decirlo mejor.

El secreto de los 33 mineros

Lo copio tal como recibi por correo.

Esto lo escribío Nieves Cebrecos una religiosa del Sagrado Corazón de Jesús, excelente maestra de filosofía y demás.... comparto con uds. su sabia reflexión.

Cada dos días ingerían dos cucharadas de atún y medio vaso de leche. Pasaron sus primeros diecisiete días con sólo ese alimento, atrapados a 700 metros de profundidad, sin contacto alguno con sus familiares ni con los otros mineros situados en la superficie.


Vivieron sumidos en una oscuridad apenas perturbada por los focos de sus cascos.

¿Qué lección nos dejan estos hombres cuya odisea aún no termina?

A la escasez de alimentos se sumó una temperatura de 30 grados centígrados, una humedad del 88%, cartones para amortiguar el piso de piedra al dormir, angustia ante la incomunicación con el exterior e incertidumbre sobre su futuro.

¿Cómo reaccionaría usted en tan difícil circunstancia?


Desde que ocurrió el accidente acordaron enfrentar juntos el reto de vivir. Aprovecharon al máximo lo que cada uno sabía, poniendolo al servicio de los demás. Decidieron ayudarse sin egoísmos, establecieron rutinas para sobrellevar el inevitable deterioro de su salud física y mental. Se organizaron como un verdadero equipo.

En lugar de lamentarse por los pocos recursos, fueron extremadamente creativos e inteligentes para usar bien los disponibles. Incluso confeccionaron un juego de dominó para distraerse, usando pequeños papeles.

¡Solidaridad, normas de convivencia, disciplina, liderazgo, una ilusión compartida! Cada uno asumió la responsabilidad de cuidarse a sí mismo y cuidar al compañero. Tolerancia ante la tensión, humor ante la angustia, esperanza ante la incertidumbre, se consolidaron en la determinación de estos luchadores.


Su objetivo fue y es vivir, teniendo por estrategia estar unidos y trabajar juntos para facilitar el rescate. Más de cien días pondrán a prueba su cordura para superar comprensibles crisis en esta situación límite.

El 22 de agosto comunicaron: "Estamos bien en el refugio los 33." En todo el mundo, todos celebramos que se concretara el primer contacto con ellos. "Allá abajo" ellos han dado lo mejor de sí mismos y triunfarán. Su actitud es ejemplar, no saldrán de esa profundidad como compañeros, sino como HERMANOS.

No se quejan, se animan; no se recriminan, se apoyan.

En cambio, "aquí arriba", con muchos más recursos, hay cientos, miles, tal vez millones de gentes, que se comportan atrapadas por prejuicios, individualismo, indiferencia y avaricia. Se encierran en sus intereses individuales, escondiéndose de quienes necesitan del apoyo de otros, vale decir sumidos en la más absoluta oscuridad pese a disfrutar de pleno Sol.

¿Quiénes permanecerán más tiempo atrapados?

¿Los mineros o los prisioneros de su pensamiento?

Esos 33 hombres están ocupados en vivir, mientras que hay organizaciones y personas que pudiendo trabajar como conjunto, apenas logran sobrevivir debido al derrumbe de sus propias actitudes.


¿Y tú? Esto debe inspirarnos para ser mejores cada día, porque nuestra familia y amigos son esos otros mineros que están con nosotros atrapados en esta situación que llamamos vida. ¿Cómo apoyas a tu equipo?