martes, 16 de marzo de 2010

La eterna batalla

¿Cuantas veces debo decirte que te tomes la leche?¿que te metas a bañar?¿que des bocados mas pequeños?¿que no grites?¿que vengas cuando te llamo?¿que te salgas de bañar?

Oh si, me parece que no soy la única que reconoce que esto forma parte de la rutina diaria, mi madre solía decir que grabaría estas frases para no tener que decirlas tantas veces. El punto es, de donde viene esta incapacidad infantil de seguir una simple instrucción, y lo peor es que sobrevive hasta edades posteriores donde considerariamos deberían ser capaces de responsabilizarse o su conocimiento del idioma es suficiente para cumplir con lo solicitado.
Por ejemplo: Hace poco aplique un exámen a unas alumnas, antes de entregar las pruebas les pido que despejen sus mesas de tal manera que solo quede: lápiz o pluma y goma; esta instrucción fue repetida 3 veces pues el ruido del salón puede evitar que todas escuchen, aún así seguian con los celulares, hojas, mochilas, libretas, y otros etcéteras sobre las mesas. Tuve que ir de manera personal a recordarles la instrucción para poder entregar las pruebas. Estoy hablando de chicas de cuando menos 20 años, apunto de terminar una licenciatura, yo pensaba "si fuera su jefa, la corro". Cualquiera pensaría que después de tantos años en la escuela sabrian las reglas básicas al presentar un exámen, pues si alguna vez lo aprendieron ya no lo recuerdan.
Buuueeno! Finalmente está en la regadera, bañandose espero. Ahora vendra la siguiente canción, "a que hora sales cariño,terminarás siendo una pasa". Al menos ya está cenado y parece que aún no es tan tarde para llegar a la cama a una hora decente y que mañana no iniciemos con aquel coro de Mecano "Hoy no me quiero levantar..."
Por el día de hoy casi puedo decir Misión Cumplida.